Día 15/05/2013 - 20.39h
La documentación conservada en los archivos municipales
bien podría ser considerada como el alma de las ciudades. Con sus
trabajos y estudios, los investigadores son capaces de extraer su
trascendencia, contribuyendo a divulgarlos entre los ciudadanos. Pocas
cosas ayudan más a consolidar la autoestima de una comunidad que el
conocimiento de su pasado y la puesta en valor del mismo. A ello
responde, con creces, el libro Documentos medievales del Archivo Municipal de Alcázar de San Juan (siglos XII-XV).
En el año 1150, el rey Alfonso II de Castilla y VII de León
donaba la aldea de Alcázar a tres de sus hombres –Juan Muñoz, Fernando
González y Pedro Rodriguez- para que procediesen a su repoblación. A
partir de ese momento, el enclave inició su desarrollo hasta convertirse
en uno de los lugares más destacados del Priorato de San Juan,
consiguiendo el título de villa en las Cortes de Burgos de 1292. Con la
finalidad de mejorar el conocimiento de aquel periodo histórico, el
Patronato Municipal de Cultura ha publicado este libro del que son
autores Pedro Andrés Porras Arboledas, Alberto Herranz Torres y
Francisco Javier Escudero Buendía.
Entre los fondos del Archivo Histórico Municipal de Alcázar de San Juan se
conservan una docena de documentos procedentes de la Edad Media
referidos a privilegios para a sus vecinos. El más antiguo es la
confirmación en 1300, por el rey Fernando IV de Castilla, del título de
villa, antes citado, y de los atributos para disponer de estandarte
propio, sello para autentificar sus documentos y un mercado semanal
donde abastecerse de lo necesario para su mantenimiento.
Con la publicación de este libro,
los lectores tienen la oportunidad de conocer cada uno de estos
manuscritos, tanto su descripción material como su contenido diplomático
e institucional. Se transcribe cada uno de ellos y se
contextualiza, para una mejor comprensión de su trascendencia en el
devenir de la historia alcazareña. Para complementar este estudio, sus
autores también abordan el análisis de otros documentos sobre Alcázar
que no se conservan en su Archivo. Gracias a este trabajo es más fácil
reconstruir con detalle una etapa crucial para el desarrollo de la
localidad y la lucha de sus regidores por mantener los privilegios que
los monarcas castellanos, de Fernando IV a los Reyes Católicos, le
fueron confiriendo o confirmando.
El estudio de los fondos medievales del Archivo Municipal
de Alcázar de San Juan no es cosa nueva. En 1739 ya se realizó un
inventario de los papeles antiguos del municipio. La transcripción del
mismo ha servido a los autores de este libro para disponer de un
elemento comparativo con el que tener un mejor conocimiento de este
corpus documental y de aquellos textos perdidos en los últimos dos
siglos y medio. Más recientemente, en 1987, José Fernando Sánchez Bódalo
publicó el trabajo Catálogo del Archivo Histórico Municipal de Alcázar de San Juan (1300-1900)
y en 2011 el Museo Municipal acogió la exposición «Alcázar en sus
documentos hasta finales del siglo XIV», donde se mostraron los
pergaminos y documentos más señeros del patrimonio alcazareño.
El libro que comentamos se completa con un cd-rom incluyendo copia digital de esta docena de documentos.
Gracias a este complemento, los interesados en el pasado de esta ciudad
manchega tienen a su alcance unos privilegios que, por su estado de
conservación o las dificultades que la lectura de la gráfica medieval
conlleva, no son de fácil acceso para todos los vecinos y estudiosos.
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