miércoles, 29 de noviembre de 2017

“Los niños con dislexia no fracasan

Araceli, además de la baja autoestima que alcanzó su hijo, ese pensar y llegar a creerse que era tonto, recuerda la ausencia de tiempo para realizar actividades extraescolares en las que se sintiese a gusto a causa de las visitas a psicólogos, logopedas y al mayor tiempo que necesitaba para hacer los deberes. “Eso quema muchísimo”, afirma.
Vía: El País
Hay que mejorar la formación, dotar a los centros de mayores recursos tecnológicos y aumentar la inversión en orientadores, logopedas y maestros
ELPAIS.COM

No hay comentarios:

Publicar un comentario