CASOS QUE CONMOCIONARION A SAN JUAN
El primer teléfono: Un avance histórico
En el año 1942 San Juan daba un paso enorme en el campo de las comunicaciones. El 1 de septiembre, hace 72 años, se inauguraba un moderno Servicio Automático de Teléfonos, que lo colocaba como una de las provincias más modernas del interior del país. Por Michel Zeghaib.
MARTES, 02 DE SEPTIEMBRE DE 2014
Por Michel Zeghaib
Si bien el público local había comenzado a hacer uso de los nuevos aparatos automáticos el sábado 29 de agosto del ‘42, fue el martes primero de septiembre de ese recordado año, pasadas las 4 de la tarde, cuando se inauguró oficialmente un avanzado servicio automático de teléfonos que le permitió al sanjuanino la comunicación directa entre usuarios asociados a la misma central. Simultáneamente, el servicio que ofrecía la Compañía Argentina de Teléfonos, comenzaba a funcionar un nuevo edificio en el que fue ubicada la Central Automática de Teléfonos.
La ceremonia de inauguración se llevó a cabo en un edificio a estrenar ubicado en la calle Gral. Acha al 347, en plena Ciudad Capital. Allí se hicieron cita las autoridades de la provincia entre las que estaban el entonces Gobernador Pedro Valenzuela y su Vice Horacio Videla; además de los Ministros de Gobierno y Obras Públicas, Rodolfo Quiroga y Francisco Bustelo, respectivamente. También hubo otras personalidades como el Jefe de la Policía, don Aristóbulo Álvarez; de la Iglesia y del mundo de las comunicaciones en la persona de Ángel Montes de Oca, Director de la mencionada Compañía.
Después del discurso de Montes de Oca, en el que justificó el esfuerzo que se había hecho para dotar a San Juan de un nuevo servicio telefónico, habló Rodolfo Quiroga en representación del Poder Ejecutivo Provincial. Pero lo más emotivo de aquella inauguración fue cuando a las 16:33hs de ese mismo primero de septiembre, el Gobernador Valenzuela, sentado frente a una mesa sobre la cual se encontraban desplegados algunos teléfonos conectados a unos auriculares, en medio de cables de distintos colores, se comunicó de manera directa con Ramón S. Castillo, entonces Presidente de la Argentina (1942-43).
Aquel momento fue muy conmovedor. Valenzuela sentado en el centro de la mesa, y alrededor de él, Montes de Oca, Mons. Audino Rodríguez y Olmos, Videla, Bustelo y algunas otras personas, quizá sentían que el tiempo parecía detenerse en el preciso momento en el que el timbre de espera hacía suponer que de un momento a otro atenderían del otro lado sin operadores humanos. Y así fue, en una primera llamada el mandatario provincial habló con el presidente; y luego, en una segunda, con el gobernador de Mendoza. Después de estas emociones la ceremonia continuó. Se ofreció un servicio de lunch, y, finalmente, se recorrieron las dependencias de las nuevas instalaciones mientras los ingenieros de la compañía explicaban el funcionamiento del moderno servicio.
Es que unos de los mayores inconvenientes más engorrosos de los antiguos teléfonos era la dependencia que tenía el usuario respecto de las operadoras que trabajaban en las centrales. La incorporación de estos nuevos servicios automáticos de telefonía le aportó a la provincia un avance rotundo en sus relaciones sociales. La comunicación se hacía cada vez más ágil y versátil, lo que facilitaba la inmediatez de la información, fenómeno que crecía en estos suelos cuyanos a pasos agigantados. Y además de esto, se incorporó en el discado un cambio de número inicial de la línea telefónica, ya que hasta aquel septiembre del ’42, los números –de cuatro dígitos, esto no cambió– que comenzaban con el 2 o el 3, fueron cambiados por el 4, número que hasta hoy sigue vigente.
Fuentes:
La Acción, agosto y septiembre de 1942.
Tribuna, agosto y septiembre de 1942.
La Acción, agosto y septiembre de 1942.
Tribuna, agosto y septiembre de 1942.
¿Cómo funciona un teléfono fijo?
Un teléfono tiene un micrófono y un auricular. El primero es un dispositivo que sirve para convertir el sonido en señales eléctricas, y el segundo hace lo contrario, vuelve a convertir las señales eléctricas en sonido. Una vez que tenemos el sonido convertido en señales eléctricas, podemos enviarlo por un cable. Pero, ¿cómo hacemos que esas señales lleguen desde nuestra casa a casa de un familiar o un amigo, por ejemplo, con la cantidad de casas que hay? Esto se hace en un lugar llamado “central automática de teléfonos, o de conmutación”, que es el lugar a donde van a parar todos los cables que salen de cada casa y, cuando se marca un número de teléfono, una máquina conecta entre sí el cable de nuestra casa con el cable de otra casa.
Entonces:
El micrófono convierte el sonido en señales eléctricas.
El auricular convierte las señales eléctricas en sonido.
En la central se conecta la casa desde la que se llama con la casa a la que se llama.
Un teléfono tiene un micrófono y un auricular. El primero es un dispositivo que sirve para convertir el sonido en señales eléctricas, y el segundo hace lo contrario, vuelve a convertir las señales eléctricas en sonido. Una vez que tenemos el sonido convertido en señales eléctricas, podemos enviarlo por un cable. Pero, ¿cómo hacemos que esas señales lleguen desde nuestra casa a casa de un familiar o un amigo, por ejemplo, con la cantidad de casas que hay? Esto se hace en un lugar llamado “central automática de teléfonos, o de conmutación”, que es el lugar a donde van a parar todos los cables que salen de cada casa y, cuando se marca un número de teléfono, una máquina conecta entre sí el cable de nuestra casa con el cable de otra casa.
Entonces:
El micrófono convierte el sonido en señales eléctricas.
El auricular convierte las señales eléctricas en sonido.
En la central se conecta la casa desde la que se llama con la casa a la que se llama.
¿Quién inventó el teléfono?
Históricamente, la invención del teléfono se le atribuyó al escocés-norteamericano Alexander Grahan Bell. Pero, en junio del año 2002, el Congreso de los Estados Unidos reconoció que el teléfono había sido concebido por un desconocido inmigrante italiano llamado Antonio Meucci.
Antonio Meucci fue in inventor italiano que alrededor del año 1857 construyó un teléfono para conectar su oficina con su dormitorio, ubicado en el segundo piso de su casa, debido al reumatismo que padecía su esposa. Sin embargo carecía del dinero suficiente para patentar su invento, por lo que lo presentó a una empresa que no le prestó atención, pero que, tampoco le devolvió los materiales. Al parecer, y esto no está probado, estos materiales cayeron en manos de Alexander Graham Bell, que se sirvió de ellos para desarrollar su teléfono y presentarlo como propio.
Históricamente, la invención del teléfono se le atribuyó al escocés-norteamericano Alexander Grahan Bell. Pero, en junio del año 2002, el Congreso de los Estados Unidos reconoció que el teléfono había sido concebido por un desconocido inmigrante italiano llamado Antonio Meucci.
Antonio Meucci fue in inventor italiano que alrededor del año 1857 construyó un teléfono para conectar su oficina con su dormitorio, ubicado en el segundo piso de su casa, debido al reumatismo que padecía su esposa. Sin embargo carecía del dinero suficiente para patentar su invento, por lo que lo presentó a una empresa que no le prestó atención, pero que, tampoco le devolvió los materiales. Al parecer, y esto no está probado, estos materiales cayeron en manos de Alexander Graham Bell, que se sirvió de ellos para desarrollar su teléfono y presentarlo como propio.
http://www.tiempodesanjuan.com/notas/2014/9/2/primer-telefono-avance-historico-64347.asp
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