Enviado por FirmasInvitadas el Mié, 20/02/2013 - 03:00.
Hace dos años en un taller de lectura que realizaba en la Biblioteca BiblioSEO, un par de niños hablaban de sus tareas académicas para el fin de semana. Ellos pensaban la manera más rápida para realizarlas y así no interferir con sus partidos de fútbol del sábado y el domingo. A pesar de asistir, todos los sábados en la mañana a una biblioteca, la estrategia que eligieron fue ir a una café internet y buscar en Google.Al conocer su decisión, les pregunté por qué no buscaban en los libros que teníamos en la biblioteca, a lo cual me respondieron, que era muy demorado y que además les exigía escribir y leer demasiado. En cambio con Google, ellos escribían lo que necesitaban, en cuestión de segundos tenían resultados, consultaba los primeros, y después de ver las imágenes y los títulos, podían hacer CTRL + C, imprimir y listo.
Después de esta respuesta, quedé sin palabras y no podía cuestionar la manera como hacían sus tareas porque era consciente que en la universidad y el trabajo, yo siempre prefiero acudir a preguntarle a Google, que desplazarme hasta alguna biblioteca, a pesar de ser bibliotecólogo.
Es muy común ver en las redes sociales, especialmente en los perfiles de colegas, frases como: Google te puede devolver 100.000 respuestas pero un bibliotecólogo te da la correcta, o conclusiones que llegan a decir que internet no sirve para informar y que eso de la web 2.0 es la causa de tanta infoxicación, donde cualquiera habla lo que quiere y todo mundo es un experto, inundado la red de basura. A mi parecer estas posturas son bastante válidas.
Lo que me pasó con los niños, me llamó la atención y decidí, aprovechando que tenía que desarrollar mi tesis de grado, profundizar más y buscar la manera de convertir a Google en una herramienta para informar mejor donde las bibliotecas fueran protagonistas. Empecé a reflexionar sobre el por qué a las personas nos gustaba ir directamente a Google en lugar de ir a una biblioteca. Al complementar mi reflexión con muchas lecturas sobre el tema, identifiqué, que aquello que nos atrae es la comodidad para acceder a la información desde cualquier lugar, sin desplazamiento, sin límites de horario y sin invertir mucho tiempo. Toda la información en un solo clic.
Muchos dirán: “¡pero si en las bibliotecas existe el servicio en línea, su catalogo está en la página web y tenemos referencia virtual!”. El problema es que estas iniciativas, en su mayoría buscan competir con Google y no trabajar con él, de manera que su estructura de contenidos no está optimizada para aparecer en los primeros lugares de sus resultados de acuerdo con la consulta de los usuarios.
Aproximadamente, cada 30 segundos se realizan 1millón búsquedas en Google de usuarios que buscan respuestas a sus inquietudes. Una cifra bastante considerable, que de ser capitalizada en una biblioteca, seguramente se convertiría en un elemento esencial en el diario vivir de los usuarios.
En la búsqueda de fuentes y recursos, que me inspiraran con una idea y así definir un tema concreto de investigación, encontré lo siguiente:
- En el Reino Unido, según un estudio titulado “Kids prefer to 'Google it' than ask teachers or parents”, el 54% de los niños entre 6 y 15 años prefieren preguntarle a Google antes que a sus papás o profesores, y en promedio los niños utilizan este buscador de 5 a 10 veces al día.
- En Estados Unidos, según una infografía realizada por EasyBib y la ALA titulada “You are what you write”, el 55% de los directores de los colegios notificaron que hay plagio en su institución. Las fuentes del plagio son Wikipedia, Yahoo answers y Answers.com. Además, el 61% de los estudiantes nunca ha usado un libro impreso y el 54% afirma que no le gusta citar las fuentes.
- En Argentina, según el reporte de Lecturalab de los resultados de un estudio de GFK, el 80% de los estudiantes confían en los datos tomados de la web con alta tendencia a consultar solo las primeras páginas. Los sitios más consultados son: el rincón del vago, Wikipedia, Yahoo Answers y Taringa.
- En el caso colombiano, según un estudio de Google Colombia, en promedio los colombianos dedican entre 4,3 horas diarias a conectarse a la web mientras que solo dedican 3 a ver televisión y 2,4 horas a escuchar la radio. Así mismo, el MinTIC reporta que ya hay 5.2 millones de colombianos conectados, de los cuales el 94% realizan búsquedas de información.
Con esta situación, me decidí a explorar el potencial que tiene el SEO o posicionamiento web aplicado desde una perspectiva bibliotecológica. Es decir, ver en el SEO una oportunidad para construir una sociedad mejor informada.
El SEO es concebido por el mundo comercial como un conjunto de técnicas que buscan optimizar un sitio web de acuerdo con los criterios de recuperación de los buscadores y así ubicarlo en los primeros resultados para aumentar el tráfico web y los porcentajes de conversión en ventas. Después de la historia que les conté, desde mi perspectiva esta definición se quedaba corta, dado que al aplicar el SEO en la gestión de las bibliotecas, este concepto tiene otra connotación, porque va más allá de ocupar una buena posición en los resultados de un motor de búsqueda. Se convierte en una oportunidad para potenciar los servicios de información y la gestión de las bibliotecas en la sociedad, desde dos puntos aspectos esenciales:
Por un lado, el posicionamiento web facilita el acceso a la información por parte de los usuarios, disminuyendo la brecha de localización de contenidos confiables en la web, provocada por la sobrecarga de información a la que están expuestos, siendo imposible discernir, analizar, seleccionar y elegir los recursos adecuados para satisfacer su necesidad. Igualmente sirve como filtro para diferenciar los contenidos confiables de los contenidos sin valor informacional.
Y por otro lado, constituye una estrategia empresarial, que convierte a las bibliotecas públicas en organizaciones dinámicas y adaptables a los cambios de su entorno, haciendo presencia en los escenarios habituales de búsqueda y recuperación de información de los usuarios.
Sé que el tema no es tan fácil como aparenta, pero siento que de eso se trata. De arriesgarse a explorar otros caminos y encontrar nuevas formas y oportunidades para informar mejor. Suena ambicioso y hasta pretencioso pero ¿no creen que nuestra profesión puede hacer de este mundo un lugar mejor, por lo menos un mundo mejor informado?
Por mi parte los invito a que sigamos trabajando y escribiendo esta historia, para que algún día tengamos un final feliz donde la biblioteca sea la fuente de respuestas confiables que necesita esta sociedad.
Espero en próximos post, compartir los resultados del diagnóstico SEO de las bibliotecas públicas colombianas, la estructura para evaluar el SEO de una web y la metodología para hacer visible nuestras unidades de información.
Después de leer este post ¿crees que es válido pensar que el servicio de búsqueda de Google es una competencia directa con nuestras unidades de información ó por el contrario, que es un gran camino por explorar?
Iván Triana. Profesional en Sistemas de Información y estudiante MBA para empresas en Internet. Me encantan los temas relacionados con la Gestión Documental, Marketing Digital para Unidades de Información, Servicios de Información digital, Big Data, entre otros. Me apasiona mi profesión y la ejerzo con disciplina, siempre pensando en el impacto positivo que puede generar en la sociedad. Soy Community Manager y Promotor de Lectura en BiblioSEO e-Responsables de la Información
.http://www.infotecarios.com/firmasinvitadas/google-una-herramienta-de-las-bibliotecas-para-informar-mejor
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