lunes, 24 de junio de 2013

“Dar una netbook sin maestros preparados no sirve para nada”

ENTREVISTA. PEDRO BARCIA. PRESIDENTE DE LA ACADEMIA NACIONAL DE EDUCACIÓN

24/06/13
¿Los nuevos dispositivos tecnológicos pueden ser un bumeran y afectar el ritmo de la clase?

Pueden serlo como toda acción fuera de lugar. Si se constituyen en factores distractores de la tarea común del aula, son perjudiciales, tanto como leer una revista en clase. Si sirven a la clase como ayudantes sin sueldos, son recomendables.
¿Ayudan a mejorar el rendimiento en el aula?

La están mejorando en las escuelas con programación organizada y seria, sin improvisaciones. Darle a un pibe una netbook sin programas configurados para la enseñanza y sin maestros al frente preparados para conducirlos en ellos es como timbre de panteón: no sirve para nada.
¿Qué rol debe tener la escuela?

Un papel de avanzada en la utiIización de lo digital en la enseñanza. Casi todos los contenidos conceptuales están en la Red de redes. Pero decirle al pibe “investigá” (con un abuso del noble verbo que diginifica la tarea de los del Conicet, en lugar de decirle “buscá” o “averiguá”, que sería lo correcto) y largarlo al mar es inútil. Allí entran a jugar un nuevo papel los bibliotecarios: indicarle los sitios especializados (historia, geografía, arqueología) y de ellos cuáles son los más confiables. Casi todos los contenidos conceptuales están en la Web. Lo que ésta ofrece más escasamente al muchacho son contenidos procedimentales y casi nada de los actitudinales (a los que la educación argentina abandona tras la etapa inicial).
¿Esto sucede en parte porque algunos docentes no saben cómo manejar a los chicos frente al uso de las nuevas tecnologías?

El docente tiene que conocer lo básico de las formas de manejo de una PC y las vías de navegación digital, pero no necesariamente ser un experto en ello. Es el alumno quien debe hacer el trabajo de búsqueda y hacerse diestro en lo técnico. Marc Prensky, en su obra desconocida en nuestro medio, “Enseñar a nativos digitales”, de 2011, sostiene básicamente que se debe ir del contenido a las preguntas y de las preguntas a las habilidades. Lo que el docente debe enseñarle, después de haberle propuesto las preguntas clave –y una vez que él o el bibliotecario lo orientó en los sitios más fiables– son las operaciones intelectuales de: valorar, ordenar jerárquicamente, analizar y sintetizar las fuentes encontradas. En esto no hay sustitución posible del docente. Un pibe lanzado a navegar sin sentido (dirección y acepción de las cosas) no es un cibernauta (cíber, en griego es timón) porque no tiene gobierno de timonel, va a los bandazos de la casualidad y a lo que encuentra.http://www.clarin.com/educacion/Dar-netbook-maestros-preparados-sirve_0_943705660.html

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