07/04/2014 CUVHONI
De una casucha a una sala que tiene hasta biblioteca
Inaugurarán la nueva sede del cuerpo de voluntarias que ayuda a los niños del Rawson.Por Fabiana Juárez - Diario De Cuyo
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Gloria De Carline, presidenta de Cuvhoni, no se cansa de recorrer una y otra vez la sala para corroborar sus dimensiones. Acomoda, una y otra vez, las sillas en las que ahora podrán sentarse, comodidad con la que no contaban antes, cuando esta ONG, que trabaja para ayudar a los niños que están internados en Pediatría del Hospital Rawson, tenía como sede una casucha de madera de 2x1 metros. A fin de mes quedará inaugurada su nueva sede, en la que habrá una biblioteca y hasta aire acondicionado.
Por 18 años, Cuvhoni funcionó en una casilla de madera que estaba a la entrada del viejo Hospital de Niños y que antes era garita para la Policía. Por su escasa dimensión, en el interior sólo cabía un ropero y 2 personas paradas, lo que dificultaba el trabajo de las voluntarias. ‘En la casucha sólo podíamos tener un poco de la ropa y pañales donados, el grueso estaba repartido en nuestras casas’, dijo Gloria De Carline.
En abril del año pasado, Cuvhoni solicitó la donación de una de las salas desocupadas para usarla como sede. Y lo consiguió.
En agosto, comenzó la mudanza al nuevo espacio de 5,40 x 6,20 metros, y a una nueva vida.
‘Una empresa nos donó 25.000 pesos con los que pudimos comprar la pintura para renovar la sala, 2 escritorios, 3 estanterías grandes de madera, 2 armarios, 1 mesa y 4 sillas, y hasta un aire acondicionado con frío y calor que ya está instalado. En nuestra nueva casa no sólo vamos a poder tener todas las donaciones ordenadas, y con las medidas higiénicas necesarias, sino también un espacio donde poder descansar y realizar las reuniones de trabajo. Hemos concretado un gran sueño’, dijo la mujer.
Por 18 años, Cuvhoni funcionó en una casilla de madera que estaba a la entrada del viejo Hospital de Niños y que antes era garita para la Policía. Por su escasa dimensión, en el interior sólo cabía un ropero y 2 personas paradas, lo que dificultaba el trabajo de las voluntarias. ‘En la casucha sólo podíamos tener un poco de la ropa y pañales donados, el grueso estaba repartido en nuestras casas’, dijo Gloria De Carline.
En abril del año pasado, Cuvhoni solicitó la donación de una de las salas desocupadas para usarla como sede. Y lo consiguió.
En agosto, comenzó la mudanza al nuevo espacio de 5,40 x 6,20 metros, y a una nueva vida.
‘Una empresa nos donó 25.000 pesos con los que pudimos comprar la pintura para renovar la sala, 2 escritorios, 3 estanterías grandes de madera, 2 armarios, 1 mesa y 4 sillas, y hasta un aire acondicionado con frío y calor que ya está instalado. En nuestra nueva casa no sólo vamos a poder tener todas las donaciones ordenadas, y con las medidas higiénicas necesarias, sino también un espacio donde poder descansar y realizar las reuniones de trabajo. Hemos concretado un gran sueño’, dijo la mujer.
http://www.diariodecuyo.com.ar/home/new_noticia.php?noticia_id=616965
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