NUEVO PRODUCTO
Es la primera producción, pequeña, pero aspiran a sumar productores y volumen para vender a Buenos Aires. Se trata de una carne mucho más sana que la de vaca y de pollo. Fueron la atracción en SOEVIN 2013. Por Viviana Pastor
MIÉRCOLES, 18 DE DICIEMBRE DE 2013
Maximiliano Delgado en su pequeño stand como productor, ofreciendo salame de llama en SOEVIN 2013, en Barreal.
Salame tipo criollo y español y jamón crudo tipo serrano de carne de llama son los nuevos productos gourmet que se pueden comprar en Barreal elaborados por el emprendedor Maximiliano Delgado. Los productos fueron furor en el 2º Simposio de Vinos y Sabores de los Valles de San Juan, SOEVIN 2013, realizado en la Finca Entre Tapias el pasado sábado 30 de noviembre.
Bajo la marca Llamas Barrealito, hace algunos días se empezaron a comercializar los salames y jamones que este año obtuvieron todos los permisos sanitarios para llegar al consumidor.
“Es un producto nuevo en San Juan por eso se tuvieron que armar protocolos de camélidos que no había en la provincia. Junto con el Programa Calidad Alimentos Argentinos (PROCAL) y el Instituto Tecnológico se fueron haciendo todos los procesos productivos y ya tenemos habilitación de análisis”, contó Delgado.
El joven emprendedor explicó las ventajas de la carne de llama: tiene un mayor contenido de proteínas en relación con otras carnes, y el más bajo contenido de grasa, por lo que no incide en la formación de colesterol. La carne de llama tiene un 24,82 % de proteína, el pollo tiene 21,87 % y la vaca, 21.01 %. Mientras que el porcentaje de grasa en la carne de llama es de 3,69 %, en el pollo es de 3,76 % y en la vaca es de 9,85 %.
“Es un producto libre de colesterol lo que significa que lo pueden comer las personas hipertensas, además no tiene agregados por lo tanto también lo pueden consumir los celíacos”, dijo. El producto podría certificar libre de TACC, es decir que no tiene aditivos de trigo, avena, cebada y centeno como la mayoría de los fiambres.
Esta primera producción certificada fue de un volumen bajo, se hicieron sólo 150 salames y jamón crudo a precios muy convenientes para tratarse de un producto de alta gama, un salame de unos 500 gramos cuesta $60.
El crecimiento se proyecta en volumen y más variedad de productos. Llamas Barrealito ya inició los trámites para elaborar llama en escabeche y en 20 días tendrían la habilitación para comercializarlos.
“Estamos en pleno crecimiento y apuntamos a que nos conozcan con esta primera comercialización y si anda bien buscaremos aumentar la crianza de animales que en esta zona se adaptan muy bien. Queremos alentar a otros productores que quieran criar para poder lograr un volumen importante y llegar al mercado de Buenos Aires donde tiene muy buena aceptación, pero sin volumen no podemos satisfacer esos mercados”, señaló Delgado.
Los inicios, de decoración
Este productor se inició solo en este emprendimiento y aclaró que no pertenece al grupo de los que participan del proyecto del Gobierno de la Provincia, Programa Camélidos de Los Andes iniciado en el 2009 (ver aparte).
“Nosotros tenemos criadero propio con unos 260 animales. Hace 8 años compramos las primeras llamas, como hobbie que mi papá trajo para tenerlos en la finca para hermosear la vista de la finca. Hace 3 años lo iniciamos con criadero para producir animales para venderlos vivos, de uso doméstico, y hace 6 meses iniciamos la producción de carne. Los productos han tenido muy buena aceptación”, contó.
Las pieles también se aprovecha, se curten y se venden para pellones de montura y también como alfombra.
El programa provincialEn el 2009, con la llegada de unos 100 animales comprados en el Norte del país, se puso en marcha en San Juan el Programa Camélidos de Los Andes. El proyecto de cría de llamas, el primero en su tipo en la provincia, tenía como objetivo contribuir al desarrollo socioeconómico de los pobladores de los valles andinos integrando los camélidos a las actividades económicas.
Se buscó fomentar y desarrollar artesanías textiles con impronta ancestral; posicionar a la provincia como productora de prendas y carnes de camélidos y promover el repoblamiento de los camélidos en la provincia.
El programa entregó este año los primeros bolsones de lana de llama para la elaboración de textiles para ser utilizada por artesanos de San Juan.
En el país
El antecedente de salames y otros productos de carne de llama en el país se remonta a mayo del 2012, cuando se puso en funcionamiento la sala de elaboración de chacinados y embutidos, en la sede de la Asociación de Pequeños Productores Aborígenes de la Puna (APPP)- Red Puna en La Quiaca.
Allí se producen hamburguesas de carne de llama, medallones de llama con quinua, salames, lomitos, chorizos, mortadela y otros derivados de la carne de llama proveniente de las comunidades aborígenes.
Los mismos son elaborados de acuerdo a procedimientos, recetas y formulas recomendadas por el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI).http://www.tiempodesanjuan.com/notas/2013/12/18/made-barreal-jamon-salame-carne-llama-47422.asp
Bajo la marca Llamas Barrealito, hace algunos días se empezaron a comercializar los salames y jamones que este año obtuvieron todos los permisos sanitarios para llegar al consumidor.
“Es un producto nuevo en San Juan por eso se tuvieron que armar protocolos de camélidos que no había en la provincia. Junto con el Programa Calidad Alimentos Argentinos (PROCAL) y el Instituto Tecnológico se fueron haciendo todos los procesos productivos y ya tenemos habilitación de análisis”, contó Delgado.
El joven emprendedor explicó las ventajas de la carne de llama: tiene un mayor contenido de proteínas en relación con otras carnes, y el más bajo contenido de grasa, por lo que no incide en la formación de colesterol. La carne de llama tiene un 24,82 % de proteína, el pollo tiene 21,87 % y la vaca, 21.01 %. Mientras que el porcentaje de grasa en la carne de llama es de 3,69 %, en el pollo es de 3,76 % y en la vaca es de 9,85 %.
“Es un producto libre de colesterol lo que significa que lo pueden comer las personas hipertensas, además no tiene agregados por lo tanto también lo pueden consumir los celíacos”, dijo. El producto podría certificar libre de TACC, es decir que no tiene aditivos de trigo, avena, cebada y centeno como la mayoría de los fiambres.
Esta primera producción certificada fue de un volumen bajo, se hicieron sólo 150 salames y jamón crudo a precios muy convenientes para tratarse de un producto de alta gama, un salame de unos 500 gramos cuesta $60.
El crecimiento se proyecta en volumen y más variedad de productos. Llamas Barrealito ya inició los trámites para elaborar llama en escabeche y en 20 días tendrían la habilitación para comercializarlos.
“Estamos en pleno crecimiento y apuntamos a que nos conozcan con esta primera comercialización y si anda bien buscaremos aumentar la crianza de animales que en esta zona se adaptan muy bien. Queremos alentar a otros productores que quieran criar para poder lograr un volumen importante y llegar al mercado de Buenos Aires donde tiene muy buena aceptación, pero sin volumen no podemos satisfacer esos mercados”, señaló Delgado.
Los inicios, de decoración
Este productor se inició solo en este emprendimiento y aclaró que no pertenece al grupo de los que participan del proyecto del Gobierno de la Provincia, Programa Camélidos de Los Andes iniciado en el 2009 (ver aparte).
“Nosotros tenemos criadero propio con unos 260 animales. Hace 8 años compramos las primeras llamas, como hobbie que mi papá trajo para tenerlos en la finca para hermosear la vista de la finca. Hace 3 años lo iniciamos con criadero para producir animales para venderlos vivos, de uso doméstico, y hace 6 meses iniciamos la producción de carne. Los productos han tenido muy buena aceptación”, contó.
Las pieles también se aprovecha, se curten y se venden para pellones de montura y también como alfombra.
El programa provincialEn el 2009, con la llegada de unos 100 animales comprados en el Norte del país, se puso en marcha en San Juan el Programa Camélidos de Los Andes. El proyecto de cría de llamas, el primero en su tipo en la provincia, tenía como objetivo contribuir al desarrollo socioeconómico de los pobladores de los valles andinos integrando los camélidos a las actividades económicas.
Se buscó fomentar y desarrollar artesanías textiles con impronta ancestral; posicionar a la provincia como productora de prendas y carnes de camélidos y promover el repoblamiento de los camélidos en la provincia.
El programa entregó este año los primeros bolsones de lana de llama para la elaboración de textiles para ser utilizada por artesanos de San Juan.
En el país
El antecedente de salames y otros productos de carne de llama en el país se remonta a mayo del 2012, cuando se puso en funcionamiento la sala de elaboración de chacinados y embutidos, en la sede de la Asociación de Pequeños Productores Aborígenes de la Puna (APPP)- Red Puna en La Quiaca.
Allí se producen hamburguesas de carne de llama, medallones de llama con quinua, salames, lomitos, chorizos, mortadela y otros derivados de la carne de llama proveniente de las comunidades aborígenes.
Los mismos son elaborados de acuerdo a procedimientos, recetas y formulas recomendadas por el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI).http://www.tiempodesanjuan.com/notas/2013/12/18/made-barreal-jamon-salame-carne-llama-47422.asp
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